Números 11:26-31 Nueva Versión Internacional (NVI)

26. Dos de los ancianos se habían quedado en el campamento. Uno se llamaba Eldad y el otro Medad. Aunque habían sido elegidos, no acudieron a la Tienda de reunión. Sin embargo, el Espíritu descansó sobre ellos y se pusieron a profetizar dentro del campamento.

27. Entonces un muchacho corrió a contárselo a Moisés:—¡Eldad y Medad están profetizando dentro del campamento!

28. Josué hijo de Nun, uno de los siervos escogidos de Moisés, exclamó:—¡Moisés, señor mío, deténlos!

29. Pero Moisés le respondió:—¿Estás celoso por mí? ¡Cómo quisiera que todo el pueblo del Señor profetizara, y que el Señor pusiera su Espíritu en todos ellos!

30. Entonces Moisés y los ancianos regresaron al campamento.

31. El Señor desató un viento que trajo codornices del mar y las dejó caer sobre el campamento. Las codornices cubrieron los alrededores del campamento, en una superficie de casi un día de camino y a una altura de casi un metro sobre la superficie del suelo.

Números 11