8. Esteban, lleno del poder y el favor de Dios, hacía milagros y señales entre el pueblo.
9. Algunos de la sinagoga llamada de los Esclavos Libertos, junto con algunos de Cirene, de Alejandría, de Cilicia y de la provincia de Asia, comenzaron a discutir con Esteban;
10. pero no podían hacerle frente, porque hablaba con la sabiduría que le daba el Espíritu Santo.